Monasterio de gran importancia para el Alt Berguedà. La iglesia, de estilo románico y planta de cruz latina, ha sufrido varias reformas, la más amplia de las cuales tuvo lugar en el siglo XVIII. Destaca el claustro de planta cuadrada, posterior a la iglesia, ejemplo típico de claustro rústico.
El antiguo monasterio se levanta a unos dos kilómetros de la Pobla de Lillet, hacia levante, en una situación privilegiada a los pies de una montaña, rodeado de prados y campos de cultivo. Le acompaña una masia y a poca distancia se encuentra la capilla román
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Monasterio de gran importancia para el Alt Berguedà. La iglesia, de estilo románico y planta de cruz latina, ha sufrido varias reformas, la más amplia de las cuales tuvo lugar en el siglo XVIII. Destaca el claustro de planta cuadrada, posterior a la iglesia, ejemplo típico de claustro rústico.
El antiguo monasterio se levanta a unos dos kilómetros de la Pobla de Lillet, hacia levante, en una situación privilegiada a los pies de una montaña, rodeado de prados y campos de cultivo. Le acompaña una masia y a poca distancia se encuentra la capilla románica de Sant Miquel de Lillet.
El 17 d’abril de 819 se nombra el Monasterio en la escritura de venta de la casa de Montclús.
En el año 833 se consagró la primitiva iglesia dedicada a Santa Maria, Sant Pere y Sant Joan del Castell de Lillet. Poco antes de 1086 se estableció aquí una pequeña comunidad canonical formada por un prior y cinco canónigos agustinianos. La vitalidad de la parroquia fue muy intensa durante los dos siglos siguientes, hasta que en 1356 se construyó una nueva iglesia en la vecina Pobla y Santa Maria perdió parte de sus feligreses y dominios eclesiásticos. A pesar de esto, la canónica mantuvo una actividad importante hasta que fue secularizada en 1592 y permaneció una comunidad de beneficiarios a cargo del paborde, cargo que, como la parroquia, se mantuvo hasta el siglo XIX.
La larga historia del monasterio se manifiesta en sus complejas ruinas. La iglesia se edificó mayormente durante el siglo XI y está formada por una sola nave con un amplio transepto. La cabecera, más tardía, consta de un absis central y de un absidiolo al sur. Durante el siglo XIV se construyó en el brazo norte del transepto un portal gótico para sustituir el primitivo muro de poniente. Las continuas reformas se prolongan hasta el siglo XVIII y transforman totalmente el aspecto de la iglesia: apertura de capillas laterales en el grosor de los muros de la nave, decoración clasicista de columnas adosadas y arcos torales, disposición de un coro a los pies de la iglesia, construcción de nuevas cubiertas, bóveda y un cimborrio.
La comunidad habitaba en las dependencias situadas a mediodía de la iglesia, organizadas alrededor de un pequeño claustro de cuatro arcos por lado, apoyados sobre macizos pilares cuadrados.
Del conjunto restan grandes cantidades de muros perforados por puertas y ventanas a diferentes alturas, no siempre coincidentes, fruto de las diferentes etapas constructivas y usos de los espacios. En este sector podemos encontrar desde las partes más antiguas del edificio con muros de opus spicatum (s. X-XI), hasta las últimas reformas del siglo XIX.
Este monasterio es un museo de diferentes épocas: pre-románico (restos absidiolo), románico lombardo (nave central, s. XI-XII), gótico (crucero norte y puerta, 1397) y clásico-barroco (columnas de tosca y capiteles de yeso, s. XVI-XVIII).
En 1816 todavía consta una comunidad formada por el rector, dos vicarios y cinco beneficiados.
En 1889 el rector es obligado a trasladarse a la Pobla.
Actualmente, el dia de San Isidro se celebra una misa con bendición de panecillos que después se reparten a todos los asistentes.