El hermoso pueblo pirenaico de Roncesvalles es muy conocido por ser lugar destacado del Camino de Santiago, ya que es uno de los dos pasos principales, el otro es Somport, por el que los peregrinos procedentes de Francia entran en España. Además es un lugar legendario glosado en el conocido Cantar de Roldán, como el escenario en el que se libró la célebre batalla de Roncesvalles.

Su monumento más destacado es, sin duda, la Real Colegiata de Santa María, obra de gran belleza del gótico francés (principios del siglo XIII), patrocinada por el rey Sancho VII “El Fuerte” quien quiso enterrarse entre sus muros.

Buena parte de la iglesia, maltratada por el tiempo y por los avatares históricos, fue reconstruida a principios del siglo XVII, pero aún conserva numerosos elementos anteriores a esa época.

Uno de ellos es la torre campanario, de indudable aspecto y función defensiva, ya que cuenta con varias ladroneras que facilitaban su defensa, lo que clasifica a este templo en el grupo de las iglesias fortalezas.

Texto Rafael Moreno García

Fotos Pablo Schnell Quiertant