Los glaciares del Cuaternario modelaron la cabecera de la Vall Fosca, excavando las cubetas en donde más tarde se alojarían una treintena de lagos. Son tan grandes y están tan juntos, que ha convertido esta zona en un gran mancha azul sobre el mapa. A pesar de estar sometidos a una fuerte explotación hidroelécrica, conservan la belleza y el carácter agreste de la alta montaña.

Este itinerario nos acerca al Estany Tort, el lago más grande de todos y continúa hasta los conocidos Estanys Colomina y Mar. A pesar de ser el recorrido más turístico del valle, nos sorprenderá descubrir dos pequeños y encantadores lagos que aunque pegados a los demás, permanecen ocultos a la vista de la mayoría de los visitantes.